Medicina funcional y antienvejecimiento

Medicina Funcional y Antienvejecimiento: Un Viaje Hacia el Bienestar

Yuco MX

Yuco les presenta una entrevista con la doctora Diana Becerril, médico general, médico funcional y psicóloga, que nos permite responder a estas dos preguntas y nos comparte cómo la “medicina funcional y regenerativa” son la piedra angular de un tratamiento personalizado y preventivo que aborda la salud desde un enfoque mente-cuerpo.

¿Qué es la medicina funcional y regenerativa?

Doc. Diana- La medicina alópata o tradicional trabaja de la siguiente manera: Hay un médico general que, cuando se encuentra con una problemática o tema más específico, canaliza al paciente con un especialista. Por ejemplo: cerebro con el neurólogo, intestino con el gastroenterólogo. El problema de las especialidades es que se enfocan en un solo tema y se olvidan del resto. La medicina funcional busca lo contrario: integrar. Empieza a explorar desde la raíz, lo más pequeño, que es a nivel celular y bioquímico. Cuando una enfermedad se sale “de las manos” porque ya no tiene cura; es cuando la aborda la medicina funcional, trabajando bajo la pregunta ¿de dónde viene esto? y se va a buscar la raíz en todos los sistemas, como el inmunológico, hormonal, nervioso, mental y psicológico. En este caso, yo voy a buscar lo más importante de cada sistema y optimizarlo, sin importar en dónde comenzó la disfunción. Ya que si hay un problema, todos los sistemas se ven afectados en mayor o menor medida. El propósito es ir ajustando detalle a detalle y así ofrecer una solución. Un claro ejemplo es que recientemente se descubrió que la depresión está sumamente ligada con problemas intestinales. Ya que los neurotransmisores que nos producen felicidad, enojo, angustia y demás, se producen en el intestino. Por esta razón, los antidepresivos no resuelven todo; a veces es mejor primero resolver el problema de estómago.

¿Qué unión tiene la medicina funcional con la regenerativa?

Doc. Diana- La medicina funcional, con el enfoque de “integrar”, se hace aliado de la medicina regenerativa; que como lo dice su nombre, busca regenerar lo más vital que es a nivel celular. Por lo tanto, la medicina funcional se apoya en la regenerativa para poder ofrecer un tratamiento integral. Aunque son dos ciencias distintas; ambas tienen el objetivo de devolver al cuerpo su mejor estado de salud.

¿Qué áreas de la medicina abarca la medicina funcional?

Doc. Diana- Todas. Aunque se pone especial atención al sistema hormonal, al psicológico-mental, al sistema neurológico y sobre todo al inmunológico y entender cómo todos ellos trabajan en conjunto. Todos los sistemas dependen el uno del otro y se produce un efecto dominó. Posiblemente si uno está afectado, el otro también en mayor o menor medida.

¿Nos puedes poner un ejemplo de cómo tratas a un paciente que llega con un problema específico para descubrir de dónde proviene?

Doc. Diana- Una de las muchas opciones para comenzar es revisar estudios de laboratorio: los niveles biológicos y bioquímicos. Basándonos en esto, podemos ver cómo está el estado de salud y los resultados los catalogamos como óptimos o no óptimos. Es decir, aunque el laboratorio te indique que estás bien dentro de un promedio poblacional, nosotros podemos encontrar que en tu caso específico requieres un poco más o un poco menos. Y los optimizamos y personalizamos con base en tu genética, actividad física, estilo de vida, si absorbes los nutrientes correctamente; entre otras variables.

¿Cómo integras la psicología en el tratamiento de un paciente a través de la medicina funcional?

Doc. Diana- Explorar el problema o la enfermedad desde la psicología es indispensable. Como el cuento del huevo y la gallina: nunca sabes si la parte psicológica te llevó a enfermar, o se afectó tu estado psicológico por estar enfermo. Algunas herramientas que uso son la meditación, ejercicios de respiración, aprender a identificar emociones, entre otros; que incorporo en mi tratamiento a través de la medicina funcional.

¿A qué se debe el envejecimiento prematuro?

Doc. Diana- Hay muchas teorías, y las más aceptadas son los radicales libres y el comportamiento de los telómeros. Esto produce senescencia celular, que es muerte celular de manera prematura. Cuando tenemos acortamiento de telómeros, expresamos genes derivados de la enfermedad. La diabetes, hipertensión y el cáncer son enfermedades del envejecimiento no saludables; ya que no deberíamos envejecer enfermos o no debería ser una condicionante. El envejecimiento puede ser saludable o patológico y ¿de qué depende? de la alimentación, el ejercicio, el estilo de vida, cantidad de estrés, irregularidades hormonales… es decir hay muchos factores que modifican la información epigenética; qué es modificar los factores necesarios para que un gen no se exprese, o se exprese (en el caso de uno de salud). Por lo tanto el envejecimiento depende de los malos hábitos, un ambiente epigenético negativo, no hacer ejercicio, tener estrés prolongado, el cual además altera tus hormonas.

En el último siglo, ¿existen factores que influyen más en el envejecimiento prematuro?

Doc. Diana- Sí, claro. El estilo de vida citadino nos obliga a comer alimentos envasados, procesados, enlatados, azúcar refinada, harinas, y entonces nos hemos visto obligados a modificar nuestros genes. Y aunque vivimos más años, vivimos más enfermos. La medicina nos ha dado muchas herramientas para prolongar nuestro tiempo de vida, pero de nada sirve si lo vivimos enfermos.

¿Hay alguna raza o sexo que envejezca con más facilidad? ¿Por qué?

Doc. Diana- Las personas más longevas suelen ser las mujeres y se asocia a temas hormonales y psicológicos. Los hombres al enfrentarse a más estrés, los ha predispuesto a un envejecimiento prematuro. Sin embargo, es cada vez menos la diferencia; ya que hombres y mujeres estamos realizando las mismas actividades, y nos estamos enfrentando a los mismos problemas en nuestro día a día. Comemos, fumamos, dormimos, tomamos, lo mismo.

¿Qué hábitos son recomendables en el día a día para prevenir el envejecimiento prematuro?

Principalmente la alimentación. Nosotros comíamos poco y lo necesario, para producir una inflamación que a su vez provoca la retención de nutrientes hasta la siguiente comida, ya que desconocías cuándo iba a pasar. Actualmente es justo al contrario; comemos a cada rato. Por lo tanto, la inflamación pierde su sentido, pues no se requiere almacenar. Entonces la inflamación evolutiva y necesaria, es ahora la que nos está matando, envejeciendo y enfermando con mucha más facilidad ya que comemos mucho y mal. La falta de ejercicio es otro factor a mejorar, al igual que el estrés, a medir y disminuir.

¿Qué suplementos nos pueden ayudar a prevenir el envejecimiento prematuro?

Lo primero es la suplementación natural que ya contienen los nutrientes necesarios a través de alimentos verdes, alimentos que provienen de los animales, y en ambos casos en cuanto menos hormonas y procesados, mejor. También las semillas son una excelente fuente de nutrientes; y evitar los azúcares y las harinas es indispensable. A partir de los 20 años, debemos tener una suplementación específica y personalizada, aparte de la alimentación. Sin embargo, hay ciertos parámetros a cuidar de forma general, donde somos deficientes en su mayoría, como sucede con la vitamina D. También debemos revisar los prebióticos y probióticos ya que la microbiota intestinal es la encargada del 80% del funcionamiento inmunológico, de los neurotransmisores; entonces si el intestino no está sano nos enfermamos. De igual forma suplementamos y revisamos los que están relacionados con la oxidación celular, como la vitamina C, vitamina E, zinc, magnesio, que son los principales o los mínimos.

¿Cuál es la diferencia entre los probióticos y los prebióticos?

Doc. Diana-Los probióticos son bacterias vivas. Y para que los mismos colonicen el intestino, deben llegar vivos; y para eso sirven los prebióticos. Son el alimento de los probióticos; sirven para que estas bacterias estén nutridas y fuertes. Entonces no tiene sentido tomar probióticos si no tomas prebióticos; ya que se van a morir.

¿Qué otros factores dentro de nuestra alimentación consideras indispensables para prevenir el envejecimiento prematuro o incluso enfermedades?

Doc. Diana- Uno de ellos es el ayuno intermitente, que permite reiniciar tu sistema celular. El ayuno produce la hormesis que es modificar la información celular, apagar el fuego, para darle tiempo a tu cuerpo de desinflamarse, y aprovechar los nutrientes, y que pueda oxidar lo que tenga que… como sucede con la computadora: vuelve a funcionar cuando la apagas y prendes. Yo recomiendo un ayuno de 14 a 16 horas que es muy amigable, ya que también se toman en cuenta las 7 a 8 horas en las que duermes. Otro factor es la dieta cetogénica, en la que quitamos o disminuimos la cantidad de carbohidratos y producimos cuerpos cetónicos. Y desde ahí, producimos energía a raíz de nuestros propios recursos, en lugar de los alimentos. No es necesario hacer cualquiera de estas de forma estricta, se pueden ir mezclando como forma de apoyo, junto con una buena elección de alimentos y la cantidad de los mismos.

¿Hay algún número de horas mínimas de actividad física para prevenir el envejecimiento?

Doc. Diana- Sí, 30 minutos diarios sin importar la edad, o tu estado de salud. Sin embargo, dos de los ejercicios con más evidencia que ayudan a la longevidad son: Uno, el entrenamiento con pesas que es de gran importancia en la regulación epigenética. Dos, el ejercicio tipo “hit” o funcional, que nos mantiene en un ritmo cardíaco por un tiempo sostenido, y nos ayuda a oxidar por más tiempo las grasas.

¿Qué otros hábitos nos pueden ayudar a la salud mental y que incorpora la medicina funcional en su tratamiento?

Doc. Diana- La psicoterapia es una excelente herramienta que te enseña a hacer un balance emocional con tus propios recursos, y a afrontar distintas situaciones. Otra terapia que recomiendo y tiene vasta documentación científica es la “cognitiva-conductual" y en el caso de la meditación el “mindfulness”. Los genes no cambian, sin embargo los factores epigenéticos sí son modificables. Por lo tanto, los mismos se van a ver moldeados con nuestros hábitos físicos, mentales, y emocionales que tienen como consecuencia un envejecimiento saludable, y prevenir enfermedades.

¿Cómo puede la medicina funcional tratar una enfermedad neurodegenerativa? O ¿colabora forzosamente con la medicina tradicional para ofrecer un tratamiento?

Doc. Diana- La medicina funcional colabora con todas las áreas y especialidades, y es necesario un tratamiento integral donde ambas trabajen de la mano. Por ejemplo, un oncólogo requiere aplicar quimioterapia que es una radiación fuerte que afecta el sistema inmunológico del paciente. Por lo tanto, la medicina funcional sirve para arreglar el terreno biológico, va a reponer la microbiota intestinal, y se va a asegurar de que el paciente esté bien nutrido, tenga los suplementos adecuados, los niveles adecuados; todo para defenderse de la quimioterapia y del cáncer.

¿Nos puedes describir un día funcional, saludable, desde que amanece hasta que anochece?

Doc. Diana- Los hábitos son importantes, pero las elecciones que hacemos día a día también. Tener un trabajo que me guste, tener una pareja que te haga sentir feliz, apoyado/a, y querido/a. Elegir amigos o grupos sociales que te hagan sentir en un ambiente saludable, y que te inviten a crecer. Además, lo básico es despertar y hacer ejercicio, buscar un espacio para meditar y tener una conexión espiritual. Trabajar, porque es importante estar activos mentalmente, sentirnos útiles y productivos. Buscar un espacio para convivir con esas personas que te suman, y al finalizar el día agradecer y ser conscientes de lo que sucedió en el transcurso del del día. Importante “no hacer demasiado” si al final ésto va a generar más estrés que progreso.

En conclusión, el viaje hacia un envejecimiento saludable y una vida plena comienza con la comprensión profunda de nuestro cuerpo y mente. La medicina funcional y regenerativa nos ofrece las herramientas para explorar nuestra salud desde un enfoque integral, abordando cada sistema de nuestro cuerpo y equilibrando nuestra salud mental. A través de hábitos diarios conscientes, elecciones nutricionales sabias y la incorporación de prácticas como el ayuno intermitente y la actividad física regular, podemos optimizar nuestro bienestar y prevenir el envejecimiento prematuro. La colaboración entre la medicina funcional y tradicional nos muestra que la integración de diversas disciplinas puede potenciar nuestros esfuerzos para enfrentar enfermedades y mantenernos saludables. En YUCO, te invitamos a unirte a nosotros en este camino hacia la salud, donde cuidamos de tu cuerpo y mente por igual. ¡Gracias por acompañarnos en este valioso viaje hacia el bienestar!

Agradecemos a la Doctora Becerril por el espacio, y por compartir su conocimiento con nosotros. Puedes seguir y encontrar a la Dra. Diana en Instagram como @dra.dianaisisbecerril y en TikTok como @dradianaibele.

Checa la entrevista completa en nuestro canal de Youtube.

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